Todo en la vida tiene fecha de caducidad.

La comida que compraste en el súper, tu suscripción del gimnasio y hasta tu tarjeta de crédito. Muchas veces bajamos la guardia y cuando menos vemos, resulta que nuestra tarjeta ya no pasa porque está vencida. Resolver el problema no es complicado, basta con comunicarnos al banco para sustituir nuestra tarjeta vencida. El problema viene cuando vemos que la nueva tarjeta tiene un número distinto y que debemos actualizar toda nuestra información.

Para muchos esto resulta el mayor dolor de cabeza, pues es una lata comunicarnos con los del teléfono, el internet, gas, agua, luz y cuantos servicios hayamos domiciliado con nuestra tarjeta de crédito. Incluso nuestras cuentas de streaming como Netflix, Spotify o Amazon se verán afectados y no podremos acceder a ellos, al menos hasta que hayamos hecho los cambios correspondientes.

¿Cómo lo resuelvo?

Caer en el llamado efecto de tarjeta vencida nos obliga a cambiar toda nuestra automatización financiera, y más si todo lo que movemos con nuestras cuentas está asociado a nuestra anterior tarjeta. Si no queremos quedarnos sin ver nuestra serie favorita porque no podemos entrar a Netflix, o peor aún, si no queremos quedarnos sin luz porque el pago “no pasó”, lo ideal es poner manos a la obra y actualizar lo más pronto posible.

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Para lograrlo basta con entrar a la configuración de pago o bien comunicarte con el banco, dependiendo del servicio que quieras pagar.

– En los servicios de streaming

En el caso de los servicios de streaming como Netflix, Spotify o Amazon, es necesario ingresar a nuestra cuenta y cambiar los datos en la opción de “Método de pago”, donde podremos ver una leyenda que indica que nuestro método de pago actual no es válido.

– En los servicios domiciliados

Para pagos como los de la televisión por cable, telefonía, luz y otros servicios básicos, resulta apremiante hacerlo lo antes posible, pues de lo contrario podrían cortarnos el servicio. Para lograrlo hay que hacer lo que haríamos normalmente al domiciliar nuestros pagos, y la forma más segura de lograrlo es indicándole a la gente de tu banco que necesitas actualizar tu información.

Como puedes ver, es necesario estar al pendiente de la fecha de caducidad de nuestra tarjeta, pues si esperamos hasta el último momento para renovarla, podríamos sufrir el molesto efecto de la tarjeta vencida.

El banco lo sabe y para que no tengas pretextos, suele comunicarse varias semanas antes de la fecha de vencimiento de tu tarjeta para que puedas solicitar el cambio de plástico.

Si tu tarjeta caducó y tienes que ir por una nueva, o bien si andas estrenando plástico, lo mejor es armarte de paciencia y realizar los cambios necesarios en tus cuentas y servicios, pues no queremos quedarnos sin ellos.

No hay excusa para sufrir las consecuencias de tener una tarjeta vencida, que en Rocket ya te contamos cómo prevenirlo y cómo hacerle frente.