Ya es diciembre y éste mes trae consigo alegría, color, paz y, por qué no decirlo, también viene cargado de un poco de abundancia… y deudas, según como hagas las cosas. Por ese motivo es que debes cuidar el aguinaldo.
Gran parte de esa abundancia viene con cuidar el aguinaldo, ese casi ‘santo grial’ que todos los trabajadores añoran y prometen no gastar año con año pero que, lo más usual es que desaparezca “milagrosamente”, casi tanto como llegó a tus manos.
Eso es exactamente lo que no queremos que pase, que ese dinero que tan bien merecido tienes por tu arduo trabajo pase “sin pena ni gloria”, es por eso que en esta ocasión te decimos las cosas que nunca debes hacer, si quieres cuidar el aguinaldo.
¿Cómo puedes cuidar el aguinaldo?
1.- Gastarlo todo:
La promesa que todos hacemos al caer ese depósito “No me lo voy a gastar” pero en realidad es la más difícil de cumplir, sobre todo en estos días de comprar y gastar sin parar.
Así que haz de cuenta que no puedes tocar parte de ese dinero, por eso date un gustito, ¿por qué no? pero algo inteligente y en lo que no se te vaya todo. Recuerda que lo importante es cuidar el aguinaldo.
2.- Poner todos los huevos en una canasta:
No le apuestes todo al mismo caballo, mejor adminístrate bien. El reto es ir corriendo a la papelería y comprar unos 10 sobres, anota en cada uno de ellos algo en que quieras usar ese dinero: regalos, enganches, fiesta… Lo que quieras. Ahora divide tu dinero. Será una buena forma de cuidar el aguinaldo de manera justa y así te alcanzará para todo.
3.- Pensar que es un regalo:
El dinero que sentimos que no es resultado de nuestro esfuerzo lo valoramos menos. El aguinaldo es producto de un largo año de trabajo, de días buenos, de aguantar a tu jefe, de los malos ratos en tráfico, etc. Así que no menosprecies ese dinero y dale el valor que se merece.
¿Quieres aprovechar al máximo tu aguinaldo? Aquí te decimos qué debes hacer….
4.- Prestarlo:
Igual que vino se fue. Pasó de tu mano a la de otra persona y ni lo sentiste, eso no está bien. Aprende a decir que ‘No’ o si te ves obligado a prestarle dinero a alguien, trata que sólo sea una parte, una que tú consideres que no te causará problemas más adelante.
5.- Sentirse Santa Claus:
Si ya estás en la fila de la lavandería con tu traje rojo en las manos… ¡Mejor guárdalo! Acéptalo: no eres Santa. Es más, ni barba te sale. No tienes por qué regalarle a todo el mundo. Cuidar tu dinero es el mejor regalo que le puedes hacer a la persona más especial: Tú.
Si aún así, deseas llenar el costal en estas fiestas decembrinas, hazlo comparando precios, no excediéndote en sus montos. Destina a todos ellos, máximo el 30% de tu aguinaldo, al final bien dicen que la intención es lo que cuenta, ¿no?
6.- Pensar que la vida se acaba en diciembre:
Si tu aguinaldo se está evaporando frente a tus ojos ¡Haz algo! Deja de gastar en diciembre como si no hubiese un mañana porque ¿qué crees? sí hay, viene enero y la cuesta sí que cuesta. Entonces preveé los gastos fijos que tendrás después y apártalos.
7.- Dejarse deslumbrar:
Si ya tenías planeado usar tu aguinaldo en algo específico; no te alejes del camino por distracciones sin sentido o compras absurdas de cosas que ni necesitas. Enfócate en lo que te ayude a mejorar tu vida de verdad e invierte en ello.
8.- No invertirlo:
Si no tienes nada claro en la cabeza para tu aguinaldo ponlo a trabajar para ti. Deja que ese dinero te genere más dinero, es lo mejor que puedes hacer. Así que ponle un alto a esos peros e investiga cómo puedes invertir tu aguinaldo.
9.- No disfrutarlo:
No olvides que el aguinaldo es un premio ‘bien ganado’ con tu esfuerzo y dedicación; entonces úsalo sabiamente y disfrútalo que al final, la vida es para eso, ¿o no?
Ahora que Rocket te dio esos 9 consejos, disfruta de las fiestas decembrinas y que los gastos no sean una preocupación el año entrante.