No importa qué tan poco sea lo que tenemos, siempre hay algo que podemos darle a los demás. El tema de las herencias es algo delicado, pues nunca se deja satisfecho a todos al hacer la repartición. Por ejemplo, si los padres dejan la casa a alguno de los hijos y al otro de que a él sólo le tocó el auto o algo así…Es por eso que una de las alternativas que se tienen es hacer una repartición en vida, osea, mientras aún podemos aclarar esas situaciones con los demás.
Decidir qué vamos a entregar, a quién se lo vamos a dar y cuándo, son algunas de las interrogantes que hay que hacernos antes de tomar una decisión. Para hacerlo bien, lo primero es conocer cómo funciona cada una y pensar cuál es la que más nos conviene a nosotros y a los nuestros de acuerdo a la situación en la que estamos. A continuación te explicamos.
Diferencia entre heredar en vida y la herencia
1.- Heredar en Vida
Para hacerlo debemos tomar todos nuestros bienes mobiliarios e inmobiliarios, tangibles e intangibles y se los damos a una persona mientras estamos vivos. No se tiene que ser familiar de esa persona para poder hacerlo. La mayoría de los expertos en leyes aseguran que cuando se trata de realizar una donación a familiares, se da por entendido que eso forma parte de una herencia en vida que se le está otorgando a esa persona.
5 ideas para gastar poco y quedar bien en la primera cita
Al igual que un testamento, la donación en vida se debe hacer por escrito y debe estar presente un notario para dejar bien en claro la decisión y que esta tenga validez legal.
Importante: Al heredar en vida también puedes ceder sólo una parte de tus pertenencias, por ejemplo, puedes dar sólo una parte de tu vivienda y no toda ella. Si tienes algo rentado y lo haces en vida, el que recibe también estará recibiendo parte de ese dinero de la renta.
2.- Herencia Post Mortem
Este tipo de herencia está fijada por un testamento que hace saber a quienes lo reciben cuál era la voluntad de esa persona sobre lo que quiere que se haga con sus bienes una vez que fallece. Muchas personas prefieren redactar ellos mismos su testamento y no acudir a un notario; aunque eso es totalmente legal, lo recomendable es hacerlo ante un notario, pues así tiene valides legal que es muy importante en caso de que haya disputas futuras.
Lo importante de un testamento es que este puede cambiar tanto como tú lo desees mientras permanezcas en vida, recordando siempre que es el último el que tendrá la vigencia definitiva.
¿Cuál es el mejor?
Si lo que buscas es beneficiar a quien le dejas tu herencia, es recomendable que lo hagas a través de un testamento post morten y no en vida, pues cuando donamos cosas en vida como parte de herencia, quien recibe deberá pagar impuestos por ello. Sin embargo, la mejor decisión es la que más conviene a tu situación actual, por eso debes pensarlo muy bien.
En Rocket te recomendamos hacerlo todo legal y certificado, ya que un documento dice mucho más que mil palabras y más en un tema tan delicado como es el de las herencias.