¿A quién no le ha pasado que llega un imprevisto o emergencia y no cuentas con dinero para cubrirlo o la quincena aún pinta lejos y no sabes de tipos de créditos? No creo que seas la excepción y, de ser así, ¡qué padre! Pero aún así hay que estar blindados para que cuando esos momentos lleguen no tengas que correr a  buscar que un familiar, amigo o hasta algún conocido para que te presten dinero y, si no son ellos, te quedes sin opciones y con un gran problema en las manos.

Es por eso que, los bancos y las entidades financieras surgen como una gran opción para esos momentos, ya que te brindan diversos tipos de créditos a los cuales puedes acceder, según tu perfil financiero, de forma segura y barata. Pero entre tantos créditos que hay y todas las instituciones que existen, aquí la duda es ¿cuál de todos los créditos es el bueno para mí?  

Y como no hay que dejar ninguna duda en el aire, por eso hoy te voy a platicar sobre los tres tipos de créditos que te pueden servir y sus características, para que identifiques mejor cuál necesitas.

CRÉDITOS PERSONALES

En este tipo de crédito te dan  dinero que puedes usar para cualquier fin. Y ya sea un banco, una financiera o una plataforma de préstamos, el beneficio de este tipo de crédito es que, aunque requieren un estudio de crédito que puede tardar varios días y tienen estrictas políticas para aceptar solicitudes, los plazos de pago son más amplios, es personalizable la cantidad de dinero que puedes pedir y las tasas de interés son de las más bajas; además, en una sola entrega, te depositan lo que necesitas. Por eso, si necesitas una buena cantidad de dinero, este tipo de crédito es el ideal.

CRÉDITOS INMEDIATOS

Este tipo de crédito es ideal cuando tienes una emergencia y, por eso, te urge dinero. Por ejemplo, cuando tienes un problema y no cuentas con nadie que te preste dinero, ni tienes tarjetas de crédito y necesitas efectivo para ya. En este tipo de crédito las aprobaciones se dan máximo en dos horas y suelen ser menos estrictos a la hora de los requisitos y aprobaciones, a diferencia de los créditos personales; sin embargo, por lo mismo que es más fácil que te presten, se manejan plazos más cortos, montos bajos y tasas de interés altas. Por eso te recomiendo usar de este tipo de crédito sólo para urgencias y aprovechar que te lo entregan ese mismo día.

TARJETAS DE CRÉDITO

La tarjeta es un crédito, una vez aprobado, es el crédito con el que vas a poder contar siempre que necesites sin tener que preocuparte por hacer documentación ni solicitar si algo surge. Además, a diferencia de los personales y los inmediatos, las tarjetas te brindan beneficios. Sin embargo, es importante que tengas en cuenta que el uso de las tarjetas de crédito debe ser bien cuidadoso y siempre debes estar consciente de tu capacidad de pago antes de usarlas para que no te vayas a endeudar de más.

Son útiles para situaciones o compras a corto plazo con montos que no sean más elevados que tus ingresos o con promociones como meses sin intereses o plazos fijos, en donde los intereses son muy bajos. Pero eso sí, aprovecha tu tarjeta en donde se puede, no te recomiendo que saques dinero de ella para hacer uso de efectivo porque las comisiones por ese uso son muy altas.

Como puedes ver, existen 3 tipos de créditos que te pueden sacar de un aprieto, pero ¿cuál es mejor? Eso depende de para qué lo necesitas, así como de tu situación financiera y crediticia. Entonces, como puedes ver, primero hay que saber qué tipo de crédito es el ideal para ti y, después, cuál de todos los créditos de ese tipo es tu mejor opción.